lunes, 4 de abril de 2011

Volar cada noche hasta nunca jamás.

Al final hasta Peter Pan acabó creciendo; y esque por mucho que lo intentes, no puedes ser niño eternamente, por mucho que quieras vivir sin responsabilidades, libre, feliz, sin preocupaciones... No, llegará un día en que te levantes por la mañana y te sientas distinto, un día en el que las cosas poco a poco empezaran a cambiar, casi sin que te des cuenta... y entonces echaras de menos esas riñas de tus padres cuando no te comías la comida, esas peleas con tus amigos porque no te han salvado en el pilla pilla, echaras de menos a los moustros de tu armario, y tener miedo a las tormentas. Y ese día querrás volver a pensar que bajo las sábanas nadie puede hacerte daño, que los abrazos de tu madre lo curan todo, desde un dolor de barriga hasta la caida mas tonta en el parque. Y te acordarás de cuando decias "yo nunca tendre novio, porque los chicos son tontos". Ingenua infancia... tan tierna, tan dulce y tan maravillosa. ¿Te acuerdas cuando pensabas que el ratoncito Perez te dejaba dinero bajo la almohada? y las vueltas que le diste a como podia entrar papa noel en tu casa si no tenías chimenea! Eramos felices con tan poco... y duraba tanto ese sentimiento...

No hay comentarios:

Publicar un comentario