Las sonrisas robadas saben mejor, las miradas que empiezan sin querer, sin saber como parar. Intentarán comprarte con promesas, intentarán hacerse de rogar. La luna viene sola, no hay que irla a buscar. Vivamos de presentes, olvidemos el ayer... Vivamos por el mero hecho de existir. Vivamos de ilusiones anclando los pies en la tierra, que la perfección solo tiene cabida a la hora de soñar. Rechaza imitaciones, nada de príncipes y princesas, de caballos, castillos y zapatos de cristal. Vamos a crear nuestra propia historia, escrita día por día sin saltarnos ni un solo beso, ni una  sola carcajada al caminar cojidos de la mano. Haciendo importante hasta el más insignificante detalle, cada coma, cada punto y a parte, cada continuará.

Las palabras flotan en el aire intentando captar un corazón sincero.