Nos empeñamos en buscar aquel motor que por una u otra razón nos mueva el corazón. Pero... ¿sabes? da igual las noches que gastes en soñar o las velas que soples, porque únicamente aparecerá cuando todo esté perdido y se te acaben las salidas, entonces y solo entonces surge ese "algo" que hace que cada día aprendas una nueva manera de sonreír. Y poco a poco, con cada pequeño detalle te das cuenta de que realmente es lo que llevabas buscando toda una vida. Y para cuando te das cuenta, para cuando empiezas a asimilar lo que esa persona significa para ti... entonces ya es tarde, estás perdido, y sabes que pase lo que pase nunca lo vas a poder olvidar, porque las cosas que de verdad calan hondo solamente se viven una vez.